En primer lugar utilizaremos algún plástico que facilite el desencofrado. Por otro lado, también empleando los mismos materiales y herramientas, en la dosificación usaremos algo más de agua para hidratar toda la mezcla. A continuación mostraré el proceso con fotografías.
En esta ilustración podemos ver cómo se ha utilizado un plástico para facilitar el desencofrado. Por otro lado, se ve cómo empleamos 4 prensillas, que a pesar de que también se ha empleado en el anterior proceso, no he mostrado ninguna ilustración de ello. Y finalmente también podemos comprobar el empleo de más agua en la dosificación, puesto que en la ilustración se aprecia algo de masa rebosando por encima de la tapa del molde. Una vez más, esperamos un día para el desencofrado.
Una vez quitada la tapa del molde, vemos que el bloque ha quedado con una superficie mucho más alisada que en la anterior prueba. El resultado parece bueno. También tenemos el plástico que nos facilitará el desencofrado. Resultado...
El bloque ha quedado mucho más compactado, pero sigue notándose la falta de compactación. Ya hemos eliminado el problema de la falta de agua.
En la siguiente entrada, probaremos con otra arcilla y otra arena, además de un nuevo molde y veremos cual ha sido el resultado.
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